Los diez escalones, de Fernando J. Múñez.

  

Autor: Fernando J. Múñez.
Editorial: Planeta.

Formato: Tapa dura con sobrecubierta.
Género: Ficción / Histórica.
Autoconclusivo: Sí.

Páginas: 600.

Precio: 21,90 euros.
ISBN: 9788408242284.
Enlace de compra: https://www.planetadelibros.com/libro-los-diez-escalones/330102

Reino de Castilla, 1283 d. C. Alvar León de Lara, cardenal de la curia, vuelve a petición de su antiguo mentor a la abadía que fue su hogar, que abandonó veinte años atrás con el alma rota por un amor imposible. Su maestro desea revelarle algo que cambiará el curso de la cristiandad.

Sin embargo, la llegada de Alvar desencadenará la tragedia: enigmas tras puertas ocultas, crímenes inexplicables, símbolos que conducen a pistas y pistas que conducen a trampas. Un descenso vertiginoso que le enfrentará a la mujer que desgarró su corazón, a la intransigencia de los cobardes, a la lucha por mantenerse entre los vivos y, finalmente, a los Diez Escalones.

Cuando supe que el autor de La cocinera de Castamar, que fue una de mis mejores lecturas de ese año, sacaba nueva novela, fue una alegría tremenda. Fernando J. Múñez tiene una forma de contar las historias muy personal, metiéndose por completo en la ambientación de la novela que está escribiendo.

En el Reino de Castilla, en el año 1283, Alvar, cardenal de la curia, regresa a la abadía que fue su hogar hace veinte años. Allí dejó su corazón hecho pedazos, tras perder al amor de su vida, con quien se volverá a encontrar tanto tiempo después.

Tras su llegada, encontrará una abadía llena de peligro, desconfianza y tragedia en cada esquina. El misterio que envuelve a los Diez Escalones le llevará a una situación que jamás podría haber imaginado, en la que tendrá que luchar por sobrevivir y por no perder lo poco que queda de la persona que fue allí.

El libro está narrado en tercera persona, con capítulos de extensión media. El prólogo nos introduce en una situación que se da dos años antes de que comience verdaderamente la novela y que deja entrever el misterio que va a envolver la misma, dejando con ganas de más.

La ambientación es uno de los aspectos que más me gustaría resaltar de la novela, algo que va muy unido a la forma de escribir del autor. Ya que, solo con su prosa, somos capaces de sentir en qué época se está desarrollando la historia, gracias al vocabulario y las expresiones que utiliza. Ambos aspectos han sido muy cuidados por el autor, se nota muchísimo, y creo que es algo a reconocer, ya que cuesta mucho más que si fuera una novela contemporánea.

Este libro lo leí hace cinco meses, pero me ha costado tanto escribir la reseña que he necesitado un tiempo para oxigenarme, pensarlo en frío y explicarme como la novela merece. Al menos voy a intentarlo. Y es que, como he contado antes, yo me quedé fascinada con La cocinera de Castamar y lo disfruté muchísimo. Además, tuve la oportunidad de comentarlo con el autor en un encuentro y me dio muy buenas vibraciones. Por todo ello me da muchísima pena que esta novela no haya sido lo que esperaba de ella y no haya podido disfrutarla realmente.

Desde que lo comencé, me dio muy buenas vibraciones. Me recordó mucho a El nombre de la rosa, es imposible no hacer referencia a esa historia, ya que guarda ciertas similitudes, aunque luego cada una lleva su historia a su manera.

La primera mitad de la novela sí la disfruté en general, con Alvar y Mario, su aprendiz, rebuscando por la abadía esos secretos que podrían salvar sus vidas o condenarlas para siempre, según se mire. 

Sin embargo, la segunda mitad me ha costado mucho terminarla por la crudeza de las escenas que se dan en la novela. Tengo que avisar de que este libro no es para cualquier persona. Imaginaba que habría escenas duras, ya he leído otros libros, y otros géneros, ambientados en esta época o en otras en las que también había mucha desgracia, como la Segunda Guerra Mundial, pero lo que he encontrado aquí ha sido un sufrimiento para mí. Siento no poder explicarlo de otra forma, pero creo que se ha recreado demasiado la crueldad, injusticia y abuso de la época. En ciertos momentos tenía que parar de leer porque me era imposible continuar, pasándolo muy mal con escenas muy crudas.

Esto, como imagino comprenderéis, por mucho valor que tenga el resto de la novela, que reconozco que ha tenido que ser complicada de crear, ha sido un factor determinante para la nota que le he dado, ya que no me he sentido bien leyéndola. Lo mismo a otra persona no le produce esas sensaciones, pero en mí ha sido así, por desgracia.

En cuanto a los personajes, Alvar me ha gustado mucho en general. Me ha parecido un hombre adelantado a su época y que se cuestiona aspectos que otros ni siquiera caerían en ello. Es un hombre entregado a la Iglesia, pero por otro lado no deja de reflexionar sobre cosas que podría estar haciendo mal o debatir sobre temas que en su entorno estarían totalmente prohibidos.

En cuanto a Isabel, he sentido mucha pena y frustración por ella. Es una mujer en un mundo dominado por los hombres, y ella en concreto está rodeada de hombres horribles, que la denigran, humillan y hunden en la mayor de las desgracias. Su reencuentro con Alvar es muy emocionante, habiendo tenido una relación en el pasado que aún tiene mucho que contar, pero para mí ella ha sido ya de por sí una figura clave en la novela y que sirve para mostrar el sometimiento en el que vive.

Por otro lado, como personaje secundario quiero destacar a Mario, un joven aprendiz que hace una perfecta pareja con Alvar en su misión por descubrir cuál es el misterio de los Diez Escalones y por qué se están viviendo situaciones tan enigmáticas últimamente en la abadía. No quiero, ni debo, decir más de él para no hacer spoiler, pero su historia me ha impactado mucho.

Por lo demás, es una novela que creo que desprende claramente que en ella hay mucho trabajo de documentación, análisis y ambientación. Además, el autor aprovecha para hacer ciertas críticas que considero muy acertadas y necesarias. Ya lo observé así en La cocinera de Castamar, un libro que os ruego leáis, porque es una maravilla.

Repito que esta es mi opinión y que, aunque yo no haya podido disfrutar de él por los aspectos que os he comentado, es posible que otras personas sí lo hagáis. Espero que me contéis si habéis leído al autor.

En definitiva, no puedo negar que ha sido una lectura muy dura para mí. Sabía que era una época diferente y podía encontrarme con escenas crudas, pero creo que hay excesivos detalles innecesarios. Lo he pasado muy mal y necesito advertiros de que hay contenido muy sensible con abusos que me han revuelto por completo.

Por lo demás, quitando estas escenas, está bien escrito y hay momentos de bastante acción. Me quedo con las críticas que desprende la novela respecto hasta dónde puede llevar el fanatismo, la fe ciega y el ansia de poder.

Velocidad lectora: 4/5 

Presencia de romance: 2/5 

Nivel de intriga: 3,5/5 

Carga dramática: 5/5 

Calidad de los Personajes: 4/5
Ambientación: 4,5/5
Estilo literario: 4/5
Originalidad: 4/5
Cierre de la historia: 2,5/5
Diseño de la edición: 4/5

No dudéis en comentar vuestra opinión.

¡Hasta el próximo libro!